Continuando con el tema del suicidio, retomaré que en el escrito anterior dije que lo abordaré desde lo que dice la Biblia y el Espiritismo; por ser estas últimas las que conozco y que hablan al respecto del tema en diferentes momentos.

 

Comienzo por hablar de La Biblia, que en el antiguo testamento o antiguo pacto; a Moisés, Dios le entregó en el monte Sinaí las tablas de la Ley. Las cuales contenían los muy conocidos diez mandamientos, conocido esto también como la Ley mosaica.

 

Es en este momento que te pido que te remitas a tu Biblia o bien a Google y busques en el libro de Éxodo, el cual es el segundo libro de La Biblia y en el Capítulo 20, que lleva por nombre Los Díez Mandamientos; observarás que en el verso o versículo 13, a la letra dice: “No matarás”. Y bueno, esto se refiere a una instrucción que literalmente dice que no hemos de matar a otra persona y obvio tampoco a nosotras o nosotros mismos.

 

De igual manera he de integrar lo que dice el Código Penal Federal, Libro Segundo, Título Decimonoveno, que lleva por nombre: Delitos contra la Vida y la Integridad corporal Capítulo II que habla del Homicidio. Donde, desde el primer momento habla de que alguien está atentando en contra de la vida e integridad corporal de otra u otro. Pero, para comprenderlo, hay que trasladar lo que dice la Ley, a que, en este caso, quien es la persona agresora es la que agrede a su propia vida, cometiendo con ello un delito. Sirva lo anterior, para decir que quien comete este acto ilícito se convierte en una o en un homicida.

 

Continuando con el tema, he de comentar, que me es imposible hablar de todas las particularidades que hay o pudiera haber al respecto para cometer este delito. Así que, solo mencionaré a las agravantes del Ley, para darnos una idea de lo que se trata y que en caso de que la persona que cometió ése ilícito fuera juzgada, de ninguna manera pasaría por inocente.

 

Bueno, pensemos que hay una vida después de la muerte y que en esa las leyes son muy parecidas a las humanas, y el ser que cometió ése delito va a ser juzgado. Lo justo sería que su juicio fuera de acuerdo a las leyes que habían en su tiempo. En el caso de la premeditación, sería culpable, porque esta se trata de que la persona tuvo el tiempo suficiente para planear intelectualmente dicho acto.

 

En el caso de la alevosía, que se refiere a que la persona actúo por sorpresa o traición, de igual manera sería encontrada culpable. Y por último, en la ventaja, que se trata de que la persona estaba adelantada en su plan, respecto al resto de las personas a su alrededor. De sobra está decir que sería encontrada culpable.

 

Pensemos que la persona de quien hablamos no se encontraba en sus cinco sentidos y se encontraba turbada, pues no lograba controlar sus emociones. O bien, se encontraba bajo los influjos de sustancias dañinas para el organismo y cometió este acto en su contra. La pregunta sería ¿Quién es más culpable, la persona que estaba cuerda o quien no se dio ni cuenta de que se suicidó?

 

La respuesta correcta, es que la primera es más culpable, porque ejerció todos los elementos agravantes de Ley. Además, te recuerdo que si tienes esta vida es para que busques la manera de vivirla lo mejor que puedas sin dañarte a ti ni a otras personas.

 

Bueno, para continuar con el tema hablaré de lo que dice al respecto la doctrina espirita respecto de las personas que se quitan la vida. Primero y si te es posible busca “El Libro de los Espíritus de Allan Kardec y ve al Capítulo III, que lleva por nombre Regreso de la Vida Corporal a la Vida Espiritual y observa la pregunta 154 en adelante. Donde, a grandes rasgos dice cómo es dicho desprendimiento del cuerpo material y el regreso del alma a lo espiritual.

 

Siendo que este tema es muy amplio y que no solo viene en este libro dicha información, pero lo elemental, sí. Te compartiré lo que yo he asimilado al respecto de otros libros y materiales de esta doctrina y espero que lo que te diga, sí te persuada de no suicidarte.

 

Bueno, has de saber que, según esto, no morimos; y esto también lo dice La Biblia, pero después de leerla toda, no encuentro que sea muy específica, respecto a lo que sigue después de esta vida. Es por ello, que me apegué por ahora el espiritismo, y digo por ahora, porque al pasar de los años me he ido allegando de más y más fuentes de información y algunas cubren parte de algún vacío ya encontrado y otras cubren otros más.

Sin embargo, la primera me ayudó a que surgiera la inquietud y me arrebatará con preguntas que solicitaban una respuesta. Las respuestas han ido llegando poco a poco, siempre a medida que me voy transformando y evolucionando. Es entonces que observo que es como la piel, primero se encuentra la capa que vemos, luego sigue, otra y otra más…

 

Es así que veo conveniente no cerrarse a una sola fuente, pues es posible que aquella tenga un vacío o con esas palabras tú no la comprendas. Bueno, hasta ahorita la doctrina espírita es la que he encontrado más completa y que sí aborda el tema más específicamente y es muy sensata en decir que hay mucho por descubrir, que lo que nos expresa es lo que digamos ya es conocido. Primeramente, en Europa y que se ha extendido llegando hasta nuestro país. Bueno, te voy a decir lo que dice al respecto esta doctrina.

 

Continúa la siguiente semana para el cierre…

 

Amor y sociedad.